En pocos días las empresas exportadoras anotaron DJVE por más de 2 millones de toneladas del cereal de la próxima campaña. Argentina puede contribuir a suplir la menor producción de Ucrania.
En líneas generales el Gobierno busca darles además un marco de estabilidad a los productores para que planifiquen una robusta campaña de trigo. A pesar de algunas voces que adelantan que habría una reducción en el área a sembrar, la apuesta del oficialismo es que los agricultores siembren igual o más que la campaña pasada. Las condiciones están dadas para que capten los mejores precios internacionales.
Luego, por supuesto, entran en cuenta variables claves de la campaña agrícola como el clima, pero lo cierto es que las proyecciones hoy parecen ser alentadoras. “Con la campaña en marcha, se podrán establecer quizás un nuevo volumen de equilibrio entre la exportación y el mercado internacional y por supuesto que todo excedente productivo se buscará que sea exportado para contribuir con la seguridad alimentaria”, detallaron las fuentes consultadas.
Otra cuestión para nada menor es que continúa firme el compromiso del ministro de Agricultura, Julián Domínguez, de no incrementar los derechos de exportación de los cereales (maíz y trigo). Es por eso que la decisión oficial es mostrarle claras señales al productor para que planifique la campaña.
Finalmente, otro dato que da cuenta de cómo se está comportando el mercado de cara a la próxima campaña, es que en marzo se operaron 1,11 millones de toneladas de trigo en el mercado de futuros del Matba Rofex. Lo que marca un crecimiento del 41% respecto a febrero y de nada menos que el 174% versus marzo del año pasado.
Fuente: Ámbito