La importancia de una correcta gestión de stock en la logística: putaway en el depósito

La organización eficiente del stock y su correcta ubicación dentro del almacén es crucial para el buen desempeño de la logística. De hecho, esta fase del proceso es tan determinante como el empaquetado o el transporte final de los productos. Un almacenamiento adecuado impacta directamente en los tiempos de preparación y en la eficiencia general del proceso logístico, reduciendo costos y mejorando la seguridad de los operarios.

¿Qué es la ubicación de existencias?

La ubicación de existencias, también conocida como putaway, es el proceso que se lleva a cabo tras la recepción de mercancías, ya sea de proveedores o de producción. Implica la organización y almacenamiento de estos productos en los estantes o racks dentro del almacén, con el objetivo de tenerlos listos para su posterior distribución. Una gestión eficiente de este proceso es esencial para mantener un inventario disponible y de fácil acceso, lo que se traduce en operaciones más rápidas y seguras.

El rol del 'putaway' en los centros de distribución

El proceso de putaway es vital en centros de distribución y almacenes, donde las mercancías se almacenan de forma temporal o permanente dependiendo del flujo de trabajo. Este proceso no solo ocurre cuando los productos llegan, sino que también se aplica en situaciones como el cross-docking o en procesos de logística inversa, cuando los productos retornan al almacén.

La decisión sobre cómo almacenar cada producto depende de diversos factores, como su tamaño, peso, volumen o incluso la frecuencia con la que se requiere. A través de un sistema avanzado de gestión de almacenes (WMS), se facilita la toma de decisiones sobre la mejor ubicación para cada mercancía, optimizando el espacio y reduciendo el riesgo de errores.

Beneficios de una buena estrategia de putaway

Implementar una estrategia de putaway bien pensada ofrece numerosos beneficios para la eficiencia operativa del almacén. Algunos de los más destacados incluyen:

• Mejor control y rastreo del inventario: Al seguir una metodología ordenada para ubicar las mercancías, se facilita el seguimiento de cada artículo, evitando pérdidas o robos.
• Optimización de la preparación de pedidos: Los artículos más demandados pueden ser almacenados en zonas de fácil acceso, reduciendo el tiempo que los operarios tardan en localizar productos y preparando pedidos de forma más ágil.
• Reducción de costos y espacio utilizado: Con un sistema adecuado, se aprovecha mejor el espacio disponible en el almacén, lo que permite recibir más productos y reducir los costos asociados con el almacenamiento.
• Incremento en la velocidad de las entregas: Un sistema de ubicación bien implementado agiliza los procesos internos del almacén, lo que impacta positivamente en el tiempo de entrega y, por ende, en toda la cadena de suministro.
• Mayor seguridad: El hecho de que las mercancías estén correctamente organizadas minimiza el riesgo de accidentes, ya que los operarios pueden moverse con mayor confianza y sin obstáculos.

Tipos de ubicación de existencias: putaway

Existen varias estrategias para gestionar la ubicación de las mercancías, y cada una se adapta a diferentes tipos de productos, dimensiones del almacén y características operativas. A continuación, se presentan algunas de las más utilizadas.

Basándonos en el espacio disponible tenemos el putaway directo y el indirecto. En el putaway directo, las mercancías no pasan por una ubicación temporal. Una vez llegan, sino que se preparan para su envío o para dejarlas en su sitio definitivo dentro del depósito; lo que permite agilizar el proceso, aunque requiere de una planificación anticipada del espacio disponible.

En el putaway indirecto, antes de ser depositados en el que será su lugar a largo plazo, los productos pasan por algún tipo de espacio temporal. En él se les puede someter a procesos, como por ejemplo el etiquetado, antes de asignarles una ubicación definitiva.

Basándonos en las reglas de ubicación, con el método de ubicación fija o asignada. Este enfoque asigna espacios específicos y permanentes para cada producto dentro del almacén. Una de las principales ventajas de este sistema es la reducción de errores, ya que cada artículo tiene su lugar determinado. Es ideal para productos que requieren condiciones especiales, como alimentos congelados que deben mantenerse a temperatura controlada, o para aquellos con un peso considerable, que deben almacenarse en estanterías bajas.

En el criterio aleatorio o no asignado, los productos no tienen una ubicación fija, sino que se colocan en cualquier espacio disponible a medida que llegan al almacén. Esto puede hacer que sea más difícil localizar los artículos cuando se necesiten. Por ello, si se opta por este sistema, es altamente recomendable contar con un software de gestión de almacenes para facilitar la localización y el control de inventarios.

Recomendaciones para una gestión eficiente del putaway

Para lograr un "putaway" eficaz, es importante seguir algunas buenas prácticas que contribuyan a mejorar la eficiencia operativa:

• Uso de tecnología avanzada: Implementar códigos de barras y sistemas de radiofrecuencia (RFID) ayuda a rastrear y localizar productos de manera rápida, reduciendo los tiempos de búsqueda y errores.
• Automatización de tareas: Automatizar procesos repetitivos minimiza la posibilidad de error humano y permite que los operarios se concentren en tareas que agreguen más valor al negocio.
• Optimización continua: Establecer protocolos claros para la recepción y almacenamiento de productos y revisar regularmente los procesos para mejorar la eficiencia.

La importancia de una correcta gestión de stock

En resumen, una gestión eficiente de la ubicación de existencias es clave para mejorar la productividad y reducir los costos en cualquier operación logística. Al implementar una estrategia de putaway bien estructurada, que considere factores como el tipo de producto, su demanda, peso y tamaño, se optimiza el uso del espacio en el almacén, se mejora la rapidez en la preparación de pedidos y se minimizan los errores. Con el apoyo de tecnologías adecuadas y la automatización de procesos, es posible agilizar el flujo de trabajo y aumentar la seguridad de los operarios, lo que repercute positivamente en la cadena de suministro en su conjunto.